De qué se trata:
Para el pueblo raizal del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, el mar es un elemento fundamental de su cultura, historia y modos de vida. Conocimientos, tradiciones y prácticas relacionadas, son el resultado de una estrecha interacción entre la comunidad insular con el ambiente marino.
En noviembre de 2020, el huracán Iota devastó las islas de Old Providence y Santa Catalina, destruyendo muchas casas, así como infraestructuras públicas. Entre las expresiones culturales que se vieron profundamente afectadas por el huracán, están las tradiciones pesqueras y de navegación. Casi el 80% de la flota pesquera artesanal fue destruida, afectando a la soberanía alimentaria, la economía y la identidad cultural de la comunidad. Mientras que las tradiciones de navegación, que se mantienen vivas como espacios lúdicos fundamentales, también resultaron afectadas, ya que los catboats y los barcos de algodón fueron parcial o totalmente destruidos.
Mientras tanto, los daños actuales en los catboats dificultan la posibilidad de realizar carreras de catboats y barcos de algodón, por lo que estos importantes espacios culturales siguen debilitándose con el tiempo. Los esfuerzos para salvaguardarlos han sido escasos y difíciles, ya que la cultura no ha sido el centro de la visión nacional y centralizada del proceso de reconstrucción, aunque las demandas locales de un enfoque cultural integral según las necesidades locales.
Para el año 2022, se pretende desarrollar la cuarta versión del Festival de Navegación Tradicional del Caribe, un espacio anual que busca contribuir a salvaguardar, valorar y fortalecer las prácticas y conocimientos de la cultura marítima del pueblo raizal, acercando nuevamente diferentes actividades al público local en Old Providence y Santa Catalina, así como en la Isla de San Andrés (también hogar del pueblo raizal y afectada por el huracán).
Lo que está sucediendo:
IV Festival de Navegación Tradicional del Caribe Insular: La cultura es lo que el huracán no se pudo llevar, el cual tendrá lugar entre el 29 de septiembre y el 8 de octubre, trayendo diversas actividades dirigidas al público local y de manera presencial tanto en San Andrés como en Providencia; así como una franja de actividades virtuales están incluidas.
En esta cuarta versión, tendremos diálogos de saberes locales, regionales y nacionales, actividades para niños y jóvenes documentales, charlas académicas, muestras de experiencias pedagógicas, entre otras. Este año queremos enfatizar la resistencia cultural y la resiliencia como tema central de nuestro festival, considerando las diversas formas que el pueblo Raizal ha utilizado para mantener su cultura e identidad en medio de la experiencia del desastre que aún afecta las vidas isleñas.
Contribuimos a crear y fortalecer un espacio anual para salvaguardar, valorar y visibilizar el patrimonio cultural marítimo del pueblo raizal relacionado con la pesca, la navegación y la construcción de embarcaciones, a través del intercambio y el diálogo de saberes entre conocedores/portadores, gestores culturales, nuevas generaciones (niños y jóvenes), activistas, académicos y público en general, así como otros actores locales y externos, como una forma de fortalecer la cultura y la identidad en el escenario post desastre que viven las islas.
Lo que hemos logrado hasta ahora:
Desde el año 2019, la Iniciativa Mar, Tierra y Cultura Vieja Providencia, una organización de base local, viene desarrollando el Festival de Navegación Tradicional del Caribe, un espacio anual que busca contribuir a salvaguardar, valorar y fortalecer las prácticas y saberes de la cultura marítima del pueblo raizal, como una forma de contribuir al fortalecimiento de la identidad y el patrimonio cultural, y a crear conciencia sobre la importancia ecológica y cultural del mar.
Después del huracán, nos hemos esforzado por continuar con esta actividad como una forma de contribuir a la reconstrucción social y cultural que no ha sido central en el proceso institucional. Así, en septiembre de 2021, desarrollamos diferentes actividades culturales en Providencia Vieja y Santa Catalina como parte del festival, vinculando a conocedores/gestores culturales, nuevas generaciones (niños y jóvenes), activistas, académicos y público en general.